DIME LO QUE VES Y TE DIRE COMO ESTAS PROGRAMADO

Observa la imagen del vaso cuidadosamente y responde:
EL VASO ESTA MEDIO LLENO?
EL VASO ESTA MEDIO VACIO?
Esta simple observación puede decirte lo bien o mal que tu mente ha sido programada. Si tu respuesta fue que viste que el vaso estaba medio lleno, indica que eres una personada que ha sido programada con información positiva lo que significa que tratas de ver lo bonito de la vida y tiendes a ver la parte positiva de cada situación que se te presente.
Si tu contestaste que el vaso esta medio vacío, te puede dar a conocer mucho de la programación mental negativa que te enseñaron o que simplemente tu aprendiste por ti misma y con la cual te auto programaste para concentrarte más en la parte negativa de la vida o de las circunstancias.
No te sientas mal por eso, la mayoría de las personas responden que el vaso esta medio vacío.
Las formas cómo puedes reprogramar tu mente para cambiar su tendencia a fijarte en la parte negativa de la vida son:
1- Empezando a ser más consciente de tus pensamientos negativos. Empieza a contar diariamente tus pensamientos negativos y te darás te cuenta como tu mente está creando en ti la tendencia a ver la vida con los lentes del negativismo. Tal vez tú no eres ni consciente de tu negatividad hasta que empiezas a darte cuenta de la cantidad de pensamientos negativos que tu mente te crea en un solo día.
2- Empieza a practicar EL AGRADECIMIENTO como parte de tu vida diaria. Empieza por contar todas las cosas buenas que hay en tu vida, las bendiciones que Dios, ser superior, universo, Jehová, buda, universo o como quieras llamarlo te ha dado. El hecho de estar leyendo este blog significa que estás vivo, tienes entendimiento y visión. Todas esas son bendiciones que has recibido. PRACTICA EL AGRADECIMIENTO en la Mañana CUANDO TE LEVANTES Y EN LA NOCHE ANTES DE DORMIRTE, veras como tu vida cambia practicando algo tan sencillo.

CUANDO TE CONCENTRAS EN LO QUE YA TIENES Y NO EN LO QUE TE FALTA
TE DAS CUENTA DE LA RIQUEZA QUE TIENES.

Recuerdas el dicho que decía así: “lloraba porque no tenía zapatos, hasta que vi al señor que no tenia pies para ponérselos”.